RECUPERANDO LA CREATIVIDAD COMO MAESTRAS
La CREATIVIDAD, en mayúsculas, va mucho más allá de cualquier manifestación artística. En el contexto educativo, es una puerta abierta a lo que sucede en este preciso (y precioso) momento, al ya famoso “aquí y ahora”; dejarnos asombrar a cada momento, abiertos a descubrir al niño, de nuevo, cada mañana. Pero, ¿cómo podemos llevar esto a nuestras aulas? Podemos empezar pensando que los niños y niñas a los que recibimos por las mañanas, no son los mismos que despedimos ayer; quizá uno tuvo un momento de desayuno difícil porque se le cayó la leche y su madre se enfadó y llega a clase más nervioso que de costumbre. Otra, quizá, está poniéndose enferma y hoy está cansada y necesita estar más cerca de ti que otros días. Otro más, quizá ayer supo que va a tener un hermanito… hay tantas y tantas posibilidades. Nosotras mismas también podemos sentirnos diferentes esta mañana: quizá no dormimos lo suficiente, o tuvimos una discusión con nuestra pareja antes de llegar al colegio, o estamos preocupadas por la salud de un familiar… No podemos obviar la infinidad de circunstancias que pueden hacer de este día, de este instante, un momento completamente diferente del anterior y, por tanto, nos invita a ofrecer una respuesta nueva, fresca, viva.
Esta creatividad que nos permite adaptarnos a lo imprevisto, quizá ya la tengamos tan normalizada que, con frecuencia, nos pase desapercibida: una familia que no terminó el traje de Carnaval a tiempo, un niño que tiene fiebre y sus padres no le pueden venir a recoger antes… continuamente estamos buscando soluciones creativas para lo inesperado. Así que, ¿por qué no dar un paso más allá? Basándonos en una estructura pedagógica sólida, respetuosa y cálida, permitámonos ser flexibles para hacer espacio suficiente para acoger, de verdad, a los niños y niñas que llegan al aula cada día. La Vida, con mayúscula, no cabe en los estrechos márgenes de programaciones ni unidades didácticas; permitámonos mirar más allá de ellas. En un espacio que alberga vida, debemos encontrar la manera de fluir con ella, desde la confianza y la apertura.
Nuria Comonte